El pensamiento
complejo está impregnado de la emergencia que deriva directamente de las
transformaciones y cambios de las organizaciones. En estas turbulentas
situaciones emergen fortalezas y debilidades que interactúan con las realidades
de la gerencia, siempre con nuevas ideas y expectativas que le va dando un giro
a los procesos administrativos.
Estas
complejidades no se evidencian cuando las definimos de manera individual pero
cuando se integran en el todo, la innovación hace que estas piezas se ajusten
en un engranaje que lo hace percibirse de manera diferente. Esta multiplicidad
de elementos no depende directamente de las partes involucradas, también
intervienen factores externos y estructurales que se concentran en las
transformaciones culturales y tecnológicas del contexto, sin embargo, esta incorporación no ocurre
arbitrariamente sino que se articula equilibradamente acomodándose al entorno
donde se manifiesta.
Si el sistema se
acopla sin que se involucren dispositivos ajenos a su realidad, se habla de
auto-organización donde las partes se van agregando sin alteraciones
particulares y, a pesar de que sean sistemas abiertos, el mismo sistema se
autoestructura progresivamente en los ciclos internos desarrollados en la
organización.
Una entidad
administrativa es un sistema complejo que sufre altibajos en su plano interno y
externo, debido a la variedad de componentes transformacionales que se enlazan
con el contexto de acción, y esta situación necesita de un liderazgo efectivo y
abierto al cambio, que sepa hacer uso de las fortalezas y debilidades de los
factores implicados. Existen técnicas y herramientas disponibles al gerente que
coadyuvan en la toma de decisiones con efectividad y eficacia en la adaptación
a los cambios suscitados en la dinámica de las organizaciones.
Por ejemplo, la
Teoría de la Cibernética Organizacional, propone una gerencia que se adapte a
la complejidad, considerando la posible interferencia de las interacciones
internas y externas ya que, en ocasiones, pueden presentarse problemas que
exigen la acción inmediata y prudente del gerente para mantener el control y el
equilibrio, con un líder capaz de tener claras las condiciones del proceso para
reconocer sus canales de intervención.
La
transformación en las organizaciones representa la complejidad que le imprimen
los mecanismos envueltos en esta actividad, por lo que los líderes deben
definir, interpretar y solventar conflictos previamente de tomar en cuenta los
cambios que vengan en un futuro para adquirir las capacidades de aprender a
solventar situaciones difíciles.
Un gerente es un
sujeto capaz de resolver conflictos y hace uso de las estrategias normativas
que se combinan con la emergencia a fin de transferir experiencias externas en
base a los estilos normativos gerenciales y se tomen las decisiones más
factibles para dirigir el curso de la organización. La transformación que
deviene de la complejidad no consiste en cambiar metodologías administrativas,
sino que resalta la necesidad de incorporar nuevas tendencias tecnológicas
evidenciadas en una gran cantidad de organizaciones para comprender y exponer
la acción gerencial vista desde la transdisciplinariedad e
interdisciplinariedad.
BUENAS NOCHES AYMARA, ESTOS ARTICULOS PUBLICADOS TIENEN DERECHOS DE AUTOR? PREGUNTO PORQUE CONSEGUI A ALGUIEN QUE COPIO INTEGRO ESTE ULTIMO ARTICULO COMO SUYO.
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